La última lección

15.06.2014 23:52
Gorlic y su escuadrón de artillería comandado por su padre tomaron posiciones en las montañas que rodean la ciudad de Zivinice. Antes de la guerra su población rondaba los 20000 almas pero el éxodo de personas de otras ciudades ya tomadas la elevó a 100000
Gorlic tenía buenos amigos en  Zivinice Compañeros de estudios y juergas en  la Universidad de Sarajevo. La enseñanza era su vocación pero el destino lo había llevado a luchar por algo que no entendía. 
La toma de la ciudad debía ser pacífica con la entrega de los oficiales Bosnios para salvaguardar la seguridad de los civiles. Pero los planes del padre de Gorlic distaban mucho de ese acuerdo. Pensaba en reducir a escombros la ciudad y acabar con toda la población musulmana.
Ante el inminente genocidio,Gorlic decidió atravesar sus propias líneas para reunirse con sus viejos colegas y contarles las intenciones de su padre. Rapidamente comenzaron la evacuación de mujeres y niños a través de los túneles de una vieja mina abandonada que los llevaría hacia la frontera croata.
Gorlic emprendió el camino de vuelta pero al salir de la ciudad cayó abatido por un francotirador bosnio. Colgaron su cadáver de una bóveda de la mezquita que daba la bienvenida a la ciudad y se prepararon para el ataque.
Antes del amanecer toda la maquina bélica serbobosnia partió hacia Zinivice sin encontrar oposición alguna; al llegar a las puertas de la ciudad el general reconoció el cuerpo de su hijo balanceándose al ritmo que marcaba el viento; tras un grito contenido de rabia ordenó inmediatamente que el convoy se detuviera para así recuperar el cadáver.
Cuando ejecutaban esa orden una lluvia de fuego de mortero cayó sobre ellos seguida de violentas explosiones. Sangre,vísceras y cuerpos mutilados abarrotaban toda la calle. Habían sido aniquilados.
El joven Gorlic eligió la amistad al odio racial. El joven maestro impartió su última lección. Una lección que salvó la vida de 100000 vidas a costa de la suya.
Actualmente el barrio que se erige donde tuvo lugar la masacre  lleva su nombre. Es recordado como el serbio bueno.
 
HERR FERREIRO